Resumo:El turista, en cuanto destinatario final de bienes y servicios durante el desarrollo de su actividad de ocio y tiempo libre, es un consumidor especialmente necesitado de protección. Este especial amparo deriva de circunstancias tales como la lejanía respecto de su residencia habitual, la inmersión en costumbres diferentes a las suyas y un concreto estado de ánimo que le convierten en posible objeto de abuso por parte de las empresas o personas con las que contrata. Así, puede utilizar bienes y servicios defectuosos que le reporten perjuicios, pudiendo pedir responsabilidades por ello. El turista es beneficiario de las normas generales sobre protección al consumidor. De ahí que en este trabajo proceda el estudio del Libro III del Real Decreto 1/2007, de 16 de noviembre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley general para la defensa de los consumidores y usuarios y otras leyes complementarias, sobre responsabilidad civil por bienes o servicios defectuosos. Finalmente, se realiza un análisis de una selección de sentencias basada en el perfil de turista como consumidor o usuario de productos y servicios defectuosos.